Enrocados.

Así se encuentran los militantes del PAL y resulta entendible que así sea, son plenamente conscientes de que su futuro político depende de manera clara del desenlace de la Operación Poniente; y en estos momentos están “jugando” al posibilismo… a saber:

Cuando el Sr. Añez en su reciente entrevista en un diario de Almería establece un paralelismo entre su estado de ánimo y el del resto de los ejidenses, cuando se le pregunta ¿cómo se encuentra al respecto del encarcelamiento de su mejor amigo? y alcalde de El Ejido. Y contesta que se encuentra preocupado, pero a la vez convencido, como todos los ejidenses, de la inocencia de Enciso. Él es plenamente consciente de que las razones de preocupación de la inmensa mayoría de los ejidenses no coinciden con las suyas.

Sr. Añez, mi preocupación en estos momentos pasa porque tengo el temor de haber sido engañado desde el Ayuntamiento, que se termine confirmando que las arcas municipales han sido esquilmadas a través de la trama empresarial montada al efecto; mi preocupación en estos momentos resulta del constante pensamiento que me embarga al pensar que la administración municipal está en manos de, una concejala que se gasta el dinero, nuestro dinero, en llamadas telefónicas a una linea del taroc; gobernados (¿debería decir desgobernados?) por un concejal de obras públicas que no sabe lo que cuesta sustituir una baldosa rota, una bombilla fundida, o un paso cebra en la vía pública; y acepta como buenos los pagos efectuados; en paralelo se podría decir lo mismo de la concejalía de hacienda.

Cuando durante cinco años el ayuntamiento suscribe con Hermanos Lirola S.L. un convenio por un importe superior a los 800.000 euros, con ningún tipo de contraprestación a los ciudadanos por esa cantidad ¿ninguno de sus compañeros era consciente de lo que firmaba?. ¿Ningún concejal era responsable de hacer un seguimiento a las obras que se realizarían contra esas partidas presupuestarias?.

Nuestras preocupaciones Sr. Añez, están situadas en este momento, en el convencimiento de estar en manos de incompetentes. La suya en la confianza de poder llegar a las próximas elecciones, sin que se haya celebrado el juicio respecto al caso que nos ocupa, y que su partido el PAL pueda seguir vivo. Esa es su mayor preocupación, por eso juega vd, al posibilismo.

Dice que los ejidenses al igual que vd. estamos convencidos de la inocencia del Sr. Enciso; y tengo que decirle que el intento que hace para que nuestro sentimiento se identifique con el suyo, tampoco surte efecto en este caso.

Nuestra propensión a la prudencia sensata y silenciosa, al no aceptar juicios paralelos, y a seguir manteniendo la presunción de inocencia de los implicados, no significa que no estemos convencidos de que la instrucción del sumario se haya hecho con todas las garantías jurídicas para los procesados. Que el mantenimiento en prisión de su amigo, por parte de la jueza a pesar de las reiteradas peticiones de puesta en libertad por parte de su abogado; no tenga una base sustentable cuando Monserrat Peña reitera que no lo libera porque hay riesgo de que pueda seguir delinquiendo…

Nuestra preocupación Sr. Añez no es que Juan Enciso pueda estar en la cárcel siendo inocente, que sería motivo suficiente para preocuparse; la preocupación es que si resulta culpable en el juicio y la jueza cometiese el error de ponerlo en libertad entre tanto se celebra , salga, pueda seguir gobernandonos y haciendo de las suyas. Concedamonos al menos la licencia de esperar a que se levante el secreto del sumario, probablemente entonces tengamos mas elementos de juicio.

Sr. Añez, de las conversaciones telefónicas grabadas a su amigo, por la policía, se desprende su conocimiento expreso de los pagos efectuados entre las empresas de la trama. ¿No le sugieren nada esas grabaciones?. A nosotros los ciudadanos si.
Sigan vds, enrocados… Quienes puedan estar entre los concejales de su partido sin implicaciones directas en la trama bien deberían abandonar el “prietas las filas” y permitir que accedan al poder municipal quienes trasmitan a los ciudadanos un cierto grado de confianza.

Vds. han derrochado toda la que le teníamos depositada.